sábado, 18 de febrero de 2012

Autonomía que da risa

Guatemala sigue siendo un país atrasadísimo y después de ver Clerks, estoy empezando a creer que así es como nos gusta. Simplemente es más conveniente quejarnos, echándole la culpa al gobierno de turno o la mediocridad empresarial, sin hacer cambios significativos para nosotros mismos o menos aún, en beneficio de todos, creyendo que hacer algo por los demás es regalar las cosas y es totalmente comprensible, al menos yo no quisiera hacer obras gratis, por un montón de estudiantes que llevan 12 años en la "tri-centenaria" o por profesionales corruptos que se manejan entre armas y venta de títulos profesionales a 30,000 al contado sólo para recibir una jugosa porción del 5% del presupuesto estatal anual.

Hablando específicamente de discursos obsoletos, viejos y más pasados de moda que los discos de acetato de Wagner, tenemos una tonelada de San Carlistas, que hoy en día siguen defendiendo a capa y espada ideales que hasta la misma Cuba YA está abandonando. Eso me recuerda a la única playera que tengo del Che Guevara; la compré en NYC a US$ 22.00 y me encantó, porque pagué un precio estúpidamente alto, en el epicentro del país más capitalista por uno de los íconos pop más famosos de toda la historia que representa una lucha fallida que un montón de falsos soñadores siguen creyendo ciegamente que él tenía la respuesta. 

Pequeñas cosas que el Comunismo/Socialismo nunca tuvo ni tendrá la visión, como hacer de la shola del Che una imagen de la cual los diseñadores Capitalistas pueden generar grandes utilidades sin pagar ni un sólo centavo en regalías. Genial. 

Pero no importara [ni me sentiría tan asqueado] si su lucha por esta autonomía al menos fuera verdadera. La excelencia académica San Carlista murió junto todos los poetas e intelectuales que realmente querían cambiar el país, haciéndole frente al país enemigo en las líneas de protesta, cuando tenía lógica decir "muerta al imperialismo Yankee" y el narcotráfico era cuestión de un par de pelones que vendían marihuana cerca del iglú, según dicen. 

Ahora, esta lucha por esa famosa pseudo-autonomía es más falsa que una risa en el Sunset Boulevard y más fingida que orgasmo en video de YouPorn. Lo sé, porque YO lo he experimentado: sexo, drogas y rocanrol dentro de los parqueos que al final, no es tan malo, como MATAR A GOLPES A UN ESTUDIANTE Y ROMPERLE LAS PIERNAS A OTRO como todo un encapuchad. Les recuerdo que la autonomía no es sinónimo de impunidad. 

Si esa es su autonomía, fracasaron como revolucionarios y prefiero reír, que sentirme atemorizado por una masa de estudiantes que luego serán nuestros médicos, abogados, ingenieros, arquitectos y administradores. 
¡VVA LA AUTONOMÍA!




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