Demandamos sexo, exigimos publicidad

Sin parar de trabajar oía el anuncio en la radio de las nuevas camas Sublime y como su hija rechazaba un viaje porque quería descansar... "sabía que querías tu cama sublime". La voz de esta tipita era fresa y en efecto, se comprueba una vez más que las fresas son bastante tontas.

Pensaba en como era de llamativo y ¿sugestivo? el anuncio del taller sobre la Aguilar Batrés. "Servicios" y una chica en bikini a lado de enderezado y pintura, alineación, balanceo, check engine y otros servicios.

O de otro anuncio si se le puede llamar así, que solo era una manta vinílica anunciando el 'car wash' de chicas, justo encima del Auto-Hotel El Refugio... Todos

los conocidos que viven por la zona recuerdan esos anuncios y aunque no vendían sexo directamente, eran bastante sugestivos.

Los publicistas creativos (o que creen serlo) se enfrentan a una masa que no quiere más que anuncios de ofertas tipo el 2X1, pague 2 lleve 3, a sólo 15 quetzales... y otra masa que comprará según que tan buena esté la del anuncio, lo malo del caso es que para vender sexo somos 'no muy buenos'